miércoles, mayo 27, 2020

Documental La plataforma española ATRESplayer desembarca en Argentina con “Pongamos que hablo de Sabina”.


Documental

La plataforma española ATRESplayer desembarca en Argentina con “Pongamos que hablo de Sabina”.

La pasión que despierta la obra del músico andaluz fue la excusa perfecta para que la plataforma española desembarque en el país.
El material dirigido por Alberto del Pozo se despliega en tres capítulos donde se explora el lado más personal de Sabina con abundante material inédito

26 de mayo de 2020 - 11:42

Con el estreno de la serie documental Pongamos que hablo de Sabina, su primera producción propia centrada en el aclamado cantautor, la plataforma española ATRESplayer Premium desembarca en la Argentina.

Las pasiones que la obra de Sabina despierta de este lado del Atlántico parece haber sido la excusa perfecta para que ATRESplayer Premium se lance en la Argentina donde el especial acerca del trovador nacido en Úbeda hace 71 años puede hallar una audiencia fascinada.

El documental conducido por Iñaki López y dirigido por Alberto del Pozo se despliega en tres capítulos donde se explora el lado más personal de Sabina con abundante material inédito entre el que destaca la charla con Cristina Zubillaga, novia y musa del artista.

Además el perfil humano del músico y poeta se delinea gracias a una galería de voces que integran, entre más, Ana Belén, Wyoming, Leiva, Vanesa Martín, Pablo López, Álvaro Urquijo, Alejo Stivel, Pancho Varona, Pablo Iglesias, Celia Villalobos, Esperanza Aguirre, Almudena Grandes, Patxi López, Enrique Cerezo y Fernando Sánchez Dragó.

Autor de exitosas piezas como “Contigo”, “Quién me ha robado el mes de abril”, “Con la frente marchita”, “A la orilla de la chimenea”, “La canción más hermosa del mundo”, “Ruido”, “Lo niego todo”, “Nos sobran los motivos” y “Amor se llama el juego”, por citar sólo algunas, esta serie llega en un momento particular de su vida.

Sabina tuvo un un hematoma intracraneal tras caerse del escenario del WiZink Center madrileño el 12 de febrero en uno de los shows de la gira No hay dos sin tres que lo reunió nuevamente con Joan Manuel Serrat y que había comenzado en noviembre en la Argentina.

Pero, además, el músico fue tributado por una diversa galería de colegas en el álbum doble Ni tan joven ni tan viejo que se ubicó a distancia de otras tres celebraciones que mereció esa producción de más de cuatro décadas y una veintena de placas (a cargo de mujeres, de artistas cubanos y de cultores del flamenco).

Para Alberto del Pozo el gran desafío de Pongamos que hablo de Sabina fue la organización del material. “El documental está dividido en tres capítulos para contar la vida de Joaquín Sabina sin caer en la narración cronológica habitual de este género. En ese sentido, establecer tres grandes temas fue crucial para armar ese collage. Los pecados, los amores y las pasiones son ejes sobre los que se puede construir un retrato de la vida y la obra de Sabina desde sus inicios hasta hoy”, explicó el realizador y agregó: “Lo más interesante, sin duda, fue realizar este documental sin contar con el propio protagonista, algo poco usual en este género pero que resultó de lo más interesante porque me permitió acercarme a un Sabina íntimo y personal, de anécdotas y curiosidades que creo ni él mismo recuerda. Así, por ejemplo, su primer grupo, los Merry Youngs, nos contaron cuál fue la primera «composición musical» de Sabina cuando apenas tenía 14 años. Incluso nos la cantan en el documental, una joya para los que amamos la música de Joaquín”.

“Me he acercado a la obra de Sabina con el máximo respeto y admiración”, aseguró Del Pozo quien, para la realización del documental, realizó más de 30 entrevistas, recuperó actuaciones de toda su carrera y escuchó cientos de entrevistas que el propio Sabina dió a diferentes medios de comunicación. “También he podido revisar su discografía y ponerme en la piel del Sabina de los 80, los 90, los 2000. Y comprender mejor sus letras, su historia y su vida, porque como nos dice Leiva: «Joaquín es el mejor retratista de sí mismo», y como afirma Almudena Grandes: «Joaquín marcó un antes y un después en la forma de escribir canciones en nuestro país». El equipo de guionistas del programa (Manuel Guerrero y Eva Pérez) y un servidor, hemos podido comprobar la vigencia de sus letras 40 años después de publicarlas”, apuntó.

Si bien Pongamos que hablo de Sabina es el material elegido por ATRESplayer Premium para desembarcar en Argentina por la gran cantidad de seguidores que el artista tiene en el país, el material habla del impacto de la carrera del andaluz en su propia tierra. “El propio Pancho Varona cuenta en el documental, a raíz de las cancelaciones de algunos conciertos de Sabina, que la gente no protesta. «Yo salgo al escenario, digo que Joaquín no puede continuar el concierto, y la gente no protesta, se va ordenadamente. Creo que se merecen que bajara del escenario les diera un abrazo a cada uno y les dijera: gracias». En España es admirado y respetado tanto por sus compañeros, como por la crítica y el público. Una de las cosas que más me ha fascinado descubrir en palabras de todos sus amigos y compañeros es la tremenda generosidad de Sabina con todos ellos. Y su fidelidad a sí mismo, es decir, Joaquín es como es, sin trampa ni cartón”, contó Del Pozo quien después de recorrer vida y obra de Sabina lo describe como alguien que “habla, cuenta, dice lo que piensa y lo que siente sin importar si es políticamente correcto o no”. Y se explayó: “Creo que esa lealtad a su forma de ser y de pensar, algo que en nuestros días está en desuso por la tiranía de lo políticamente correcto hace que la gente lo respete, lo valore y lo admire. De hecho, Sabina genera simpatías en todos los partidos políticos de España, se lleva bien con músicos de toda la vida y con figuras emergentes, es un imán para todos, y una esponja que escucha y absorbe lo bueno de cada una de las personas con las que se rodea”.

Un artista intergeneracional
La ausencia de Sabina en el documental tiene que ver con el fatídico accidente que sufrió a principios de este años. “Fue el primer invitado a participar en este documental”, reconoció el director y explicó: “Lamentablemente, su gira por Latinoamérica, sus compromisos en España y su fatídico accidente a principios de 2020 le impidieron participar y eso hizo que tuviéramos que ser más originales a la hora de crear la narrativa del documental”.

Pese al contratiempo, el director arriesgó: “El resultado es incluso más interesante, porque buceamos en el recuerdo y las anécdotas de gente cercana a Sabina que, en algunos casos, es la primera vez que hablan para una cámara de televisión. Es el caso, por ejemplo, de Cristina Zubillaga, la protagonista de 19 días y 500 noches“.

Y feliz por el resultado alcanzado, aseguró: “Me encantaría compartir con Joaquín la experiencia del primer visionado, ver sus reacciones, conocer sus opiniones y sus matizaciones. Estoy seguro de que se va a reír, se va a sorprender y se va a emocionar”.

Del Pozo había dirigido anteriormente un capítulo del programa El Legado dedicado a Sabina que puede verse por YouTube y que considera “la primera pieza para esta serie documental”.

“Ese programa de televisión emitido en la tierra natal de Joaquín, Andalucía me sirvió para conocer mejor a la persona que hay tras el artista. El programa tuvo una acogida en términos de audiencia muy buena, y ahí comprobamos lo que todos intuíamos, que Sabina es un artista intergeneracional”, afirmó.

A modo de balance en torno al personaje y su impacto, Del Pozo subrayó: “Sabina gusta a seguidores de toda la vida, pero también atrae la atención de un público joven y socialmente comprometido. En ese sentido, creo que Joaquín, a día de hoy, sigue siendo moderno”.

Mara Barros, la voz de Sabina vuelve a ‘Popstars’






Mara Barros, la voz de Sabina vuelve a ‘Popstars’

GENTEHUELVA
27 mayo, 2020 María Fernández.

Hace 18 años, la onubense Marra Barros daba a conocer su potencial como cantante a través del popular programa de televisión Popstars: todo por un sueño.

Un concurso de talentos, emitido en Telecinco en el verano del 2002 y presentado por Jesús Vázquez junto a Elia Galera, que se convirtió en todo un boom del momento, con 2,3 millones de espectadores de media.

Tras el éxito del programa, la onubense consiguió hacerse un hueco en el mundo de la música. Su nombre ha estado presente en las marquesinas de los teatros de la Gran Vía de Madrid, llegando a protagonizar musicales como Hoy no me puedo levantar o Enamorados anónimos.

En 2009 Mara entra a formar parte de la banda del gran Joaquín Sabina, con el que graba Vinagre y rosas, 500 noches para una crisis y sú último trabajo, Lo niego todo. Desde entonces, esta onubense ha acompañado al artista en todas sus giras musicales.

“Cuando salí del programa me ofrecieron grabar un disco en solitario (Dímelo tú) en el que participaron Pancho Céspedes y Paolo Vallesi y con el que estuve dos años girando por el país.
Después de mi primera experiencia discográfica el destino me llevó a probar suerte en el teatro musical, llegando a protagonizar obras como Hoy no me puedo levantar o Enamorados anónimos.

Volví a sacar otro disco (Por motivos personales) que aún me sigue dando muchas alegrías y con el que, además de nuestro país, he podido viajar a México y Costa Rica.
He trabajado como corista en las giras de artistas como Camilo Sesto, David Barrul o Joan Manuel Serrat y desde hace 11 años soy la voz femenina que acompaña en sus discos y giras a Joaquín Sabina“, cuenta la cantante a este diario.

Mara, que reside en Madrid desde el 2003, asegura que lleva viviendo de la música desde los 18 años y se considera afortunada por ello.

Sin embargo, la onubense también ha notado el sabor agridulce que la crisis del coronavirus ha dejado entre los profesionales del sector cultural.

“Creo que este encierro ha sido capaz de sacar lo mejor del ser humano pero también lo peor. Así que intento quedarme con lo realmente positivo del momento que estamos pasando, ser optimista a pesar de que mi sector, el de la cultura, sea uno de los más afectados y no sepamos cuándo podremos retomar nuestra actividad habitual”, confiesa.

Con todo, la pandemia ha servido de puente para que la onubense se reencontrara profesionalmente con sus compañeras del mítico concurso Popstars. Recientemente las concursantes del talent show de Telecinco, se han reunido virtualmente para regrabar el himno del programa y amenizar el confinamiento. Incluso han contado con el presentador Jesús Vázquez y los miembros del jurado, Michele MacCain, Lucas Holten y Doctor Flo.

Y como más vale tarde que nunca, 18 años después de que se emitiera el concurso, la de Huelva junto a las ganadoras ‘Bellepop’ y Roser, recorrerán la geografía española entonando los éxitos del programa en una gira que ya tiene fechas confirmadas, y que muy pronto, darán a conocer.

“Ha sido muy emocionante poder reunirnos 24 de las 30 aspirantes de Popstars. Aunque ya muchas manteníamos el contacto a través de un grupo de whatsapp, es cierto que hacía mucho tiempo que no hablaba con otras, así que a nivel personal ha sido muy muy bonito.

A nivel profesional estamos todas muy sorprendidas de la repercusión mediática que ha tenido nuestro reencuentro y las consecuencias de nuestra unión ya que, gracias al vídeo con nuestro himno, ha surgido que hagamos un concierto todas juntas a final de año y que podamos recorrer en gira varias ciudades del país”, explica Mara.

La idea de la gira ha surgido de forma inesperada gracias a la repercusión del vídeo.
Es tanta la ilusión que tenemos por trabajar juntas de nuevo que hemos abierto la contratación ansiosas por compartir con todos las canciones que, sin duda, han marcado nuestras vidas, las que interpretamos en el concurso. Haremos un concierto a final de año en Madrid donde estaremos las 24 compañeras que grabamos el vídeo. Mover una gira con 24 chicas y el equipo humano que nos acompaña es completamente inviable y más aún en la situación económica que atraviesa el país, así que en principio, y debido a la demanda de promotores, estaremos Bellepop, el grupo ganador del concurso, pero con una formación nueva, Roser, sin duda una de las concursantes más mediáticas y una servidora. A nosotras se sumarán las concursantes residentes en las ciudades que visitemos, si sus agendas y compromisos se lo permiten.

Aún no hemos anunciado las fechas y por lo tanto tampoco los puntos de venta, pero estad atentos a nuestras redes, porque os mantendremos informados de todo”, cuenta.

Mara se enorgullece del cariño incondicional que todavía sigue recibiendo de los fans de aquel programa. “Para mí ha sido muy sorprendente, pero sí. Hay muchísima gente que recuerda Popstars. Nunca hemos dejado de sentir el cariño de los fans del programa. Es cierto que durante estos 18 años yo enfoqué mi carrera hacia otro género, un poco alejado del universo Popstars y pensé que ya no me asociarían al programa. Sin embargo, me sorprende muy gratamente descubrir que sí”, asegura la cantante.

Tendremos que esperar a que pasen estos meses de incertidumbre por la crisis sanitaria para saber si, finalmente, los onubenses podrán disfrutar del talento de Mara Barros junto al mítico grupo de Popstars en Huelva.

El mensaje de ánimo de los actores del musical de Serrat con una versión de ‘Hoy puede ser un gran día’

El mensaje de ánimo de los actores del musical de Serrat con una versión de ‘Hoy puede ser un gran día’

OKDIARIO
27/05/2020 16:29

‘Aquellas pequeñas cosas’, así es como se llama el musical basado en las canciones de Joan Manuel Serrat que llegará al público en cuanto las circunstancias lo permitan. El musical, que tiene guion es de Jordi Galcerán, está bajo la dirección de Ariel del Mastro y producido por Julia Gómez Cora, se vio interrumpido por la pandemia, pero los actores han querido mandar un mensaje de ánimo y esperanza en esta trágica situación.

Gómez Cora explica a OKDIARIO que este vídeo «lo grabaron como mensaje de animo y pidiendo a todos responsabilidad porque ahora depende de nosotros que nos cuidemos y, además, podamos recuperar la normalidad cuanto antes, pero no la nueva normalidad, como la llaman, sino la normalidad de antes de la pandemia que es la que necesita el mundo del teatro«.

Cree la productora del musical ‘Aquellas pequeñas cosas’ que en este momento «el teatro y las artes escénicas estamos siendo uno de los sectores más castigados, por eso los chicos tenían la necesidad de hacer algo y, además, habíamos leído que esta canción de ‘Hoy puede ser un gran día‘ era una de las más descargadas por su mensaje positivo

Este año, explica Gómez Cora, la previsión es que el musical se estrene en 2021, ya que debido a las restricciones de aforo y la distancia social que marcan las normas de las autoridades sanitarias no serán posibles grandes aforos. «Debemos tener en cuenta que el teatro tiene un gran componente social y las medidas que tenemos que tomar en este momento son contrarias con la experiencia de entrar en un teatro porque esto va a reír, de llorar, de tocarse, etc. Date cuenta que no sólo el público está muy junto, sino que también los actores cuentan las historias abrazándose. Por todo ello es complicado llevar a cabo esa experiencia».

El musical, además, y según detalla la productora teatral, vive del turismo y ahora mismo va a tardar en tener visitantes, es, de hecho, prácticamente inexistente. «El musical lo estrenaremos cuando podamos», explica, aunque señala que «la buena noticia va a ser que el teatro y la cultura va a ser más necesario que nunca porque, a pesar de los malos momentos, siempre ha resurgido». Y concluye: «Tras pasar por un momento así es necesario emocionarse y es elemental para alimentar el espíritu. Resurgiremos, estoy segura».

En este musical el equipo de ‘Aquellas pequeñas cosas’ basado en las canciones del artista catalán lleva alrededor de cinco años trabajando y en que, además, ha estado 100% involucrado el propio Serrat. «Cuando le contamos el proyecto, la condición que puso él es que quería supervisar todo, así que ha estado involucrado en todas las áreas. Es su legado y quiere que todo esté a la altura de toda su carrera», concluye Gómez Caro.

martes, mayo 26, 2020

Qué fue de la 'Princesa' de Joaquín Sabina

Qué fue de la 'Princesa' de Joaquín Sabina

La auténtica 'Princesa' vive en Barcelona y no, no se vio envuelta "en una muerte con asalto a farmacia"

SUSANA ELGUEAMadrid 05/01/2019 - 21:27 h. CET

Princesa es una de las canciones más míticas de Joaquín Sabina. Pertenece al album Juez y Parte, de 1985, el cuarto disco del músico jienense, que grabó con Viceversa, la banda que entonces le acompañaba en directo. También se incluyó en el album Joaquín Sabina y Viceversa en directo, el segundo disco en vivo de Sabina (Ariola), grabado en directo en el teatro Salamanca de Madrid los días 14 y 15 de febrero de 1986.

Como regalo de ese recién estrenado 2019 Pancho Varona, compañero inseparable, productor, compositor y guitarrista de Sabina desde hace más de 35 años, ha desvelado algunos detalles del tema en su canal de Youtube, Lo que nadie sabe de las canciones que todos sabemos.

1. Princesa se compuso en 1981, cuando Joaquín Sabina se acompañaba de la banda Viceversa. La letra es de Sabina pero no así la musica, que es de Juan Antonio Muriel.

2. Muriel la presentó en el festival de música de Benidorm de 1982 y quedó en segundo lugar, ganando la Sirenita de plata. La letra es algo diferente al clásico de Sabina. Llegas demasiado tarde, princesa; no hay más leña que la que arde, princesa... cantaba Muriel en su estribillo. El primer premio se lo llevó el chileno Fernando Ubiergo con Yo pienso en ti y el tercer puesto fue para dos hermanas gemelas, Susi y Luisi, que años después sumarían a una tercera hermana para crear Las Supremas de Móstoles.

3. Princesa es un tema de récord; es la canción que más se ha tocado en repertorios en conciertos de Sabina.

4. Hace unos años Sabina le quitó el aire de balada cambiando el tempo de la canción para darle un aire mas roquero en los directos.

5. En el escenario, junto a Sabina, la han cantado Leiva, Dani Martín... y podemos encontrar versiones de Princesa de Miguel Ríos y del propio autor de la música, Juan Antonio Muriel.

6. La protagonista de Princesa es una amiga que Joaquín conoció en Logroño y que, pese a lo que dice la letra, tiene un excelente estado de salud y vive en Barcelona.

Arianne, la princesa de Joaquín Sabina.

Lejos de lo que apunta la letra de la canción, la princesa de Sabina no murió en el atraco a una farmacia. Reside en Barcelona y, como explica Pancho Varona, tiene muy buen estado de salud. Se llama Arianne Sved y ella misma, en su blog, explica que conoció al cantante en Logroño, donde ella vivía porque su padre trabajaba como director adjunto en un hotel de la calle Portales y su madre, en una bodega. En la capital riojana comenzó a moverse por locales de ensayo y fue en ese ambiente donde conoció a Sabina, que era 14 años mayor que ella. La década de los 70 estaba acabando. Arianne cuenta que tuvieron un "amorío" y que un par de años más tarde sacó el tema Princesa: "Habla de una chica que le había embelesado pero que, al engancharse a la heroína, había perdido todo su encanto. La canción habla de mí, básicamente, aunque se permitió mucha licencia artística en la letra". La princesa de Sabina explica, algunas décadas después, que "por suerte", nunca "sufrió una sobredosis" ni robó una farmacia: "Conseguí desengancharme a tiempo, a diferencia de algunos amigos yonkis que perdí por el camino".

PRINCESA

Entre la cirrosis y la sobredosis andas siempre muñeca

Con tu sucia camisa y en lugar de sonrisa una especie de mueca

Cómo no imaginarte, cómo no recordarte hace apenas dos años

Cuando eras la princesa de la boca de fresa, cuando tení­as aún esa forma de hacerte daño

Ahora es demasiado tarde princesa

Búscate otro perro que te ladre princesa

Maldito sea el gurú que levantó entre tú y yo un silencio oscuro

Del que ya sólo sales para decirme "Vale, déjame veinte duros"

Ya no te tengo miedo, nena, pero no puedo seguirte en tu viaje

Cuántas veces hubiera dado la vida entera porque tú me pidieras llevarte el equipaje

Ahora es demasiado tarde princesa

Búscate otro perro que te ladre princesa

Tú que sembraste en todas las islas de la moda las flores de tu gracia

Cómo no ibas a verte envuelta en una muerte con asalto a farmacia

Con qué ley condenarte si somos juez y parte todos de tus andanzas

Sigue con tus movidas, reina, pero no pidas que me pase la vida pagándote fianzas

Ahora es demasiado tarde princesa

Búscate otro perro que te ladre princesa

Un grupo de artistas preparaban un musical...

Un grupo de artistas preparaban un musical.... iban a empezar a ensayar y el COVID congeló todos sus planes. Su historia es como la de tantos otros que aguardan en casa pacientes hasta que puedan volver a los escenarios. Mientras, esa energía creadora y talento hizo que quieran mandar este mensaje de aliento. Más información en http://www.broadwayworld.com.

La historia tras 'Quién me ha robado el mes de abril': Joaquín Sabina, Alfredo Landa y un tema para perdedores

La historia tras 'Quién me ha robado el mes de abril': Joaquín Sabina, Alfredo Landa y un tema para perdedores

'Quién me ha robado el mes de abril' (1988) es una canción por encargo para la banda sonora de 'Sinatra

TWITTER DE SUSANA ELGUEA
SUSANA ELGUEA Madrid 24/01/2020 - 11:36 h. CET

Quién me ha robado el mes de abril es uno de los temas clásicos de Joaquín Sabina, una canción enorme escrita para perdedores que está incluida en el álbum El hombre del traje gris, sexto disco del cantautor jienense. Es de 1988, esos años en los que la voz brotaba fácil. El disco tiene maravillas como Una de romanos, Cuando aprieta el frío y Eva tomando el sol. Lo que pocos saben es la historia detrás de Quién me ha robado el mes de abril, una historia en la que se mezclan Alfredo Landa y el cine. Los detalles de esta extraña pareja Sabina-Landa los desvela el guitarrista de la banda de Sabina, Pancho Varona, empeñado en la admirable tarea de que los fans sabinistas tengan todos los detalles de cada una de las canciones del cantautor.

La sorpresa llega al saber que Quién me ha robado el mes de abril fue un encargo para la banda sonora de una película de 1988 que protagonizó Alfredo Landa. El actor daba vida a un hombre que se malganaba la vida en Barcelona como imitador de Frank Sinatra. Su mujer le deja y acaba en una pensión. Este drama se llamó Sinatra, contaba en el reparto además con Maribel Verdú y Ana Obregón e incluso el propio Joaquín Sabina hizo un cameo caracterizado como Groucho Marx.

Sabina escribió otro drama para ese drama, una letra sobre desdichados basada en ese personaje gris al que daba vida Alfredo Landa. Después de la introducción inolvidable a la guitarra de Varona, escuchamos varias historias de fracasos de la mano de personas desesperadas: el hombre del traje gris con su sucio calendario; la chica de BUP que suspende casi todas las asignaturas tras quedarse embaraza; la madre derrotada que se marchita en el sillón porque el marido se largó con una peluquera 20 años menor... Dramas encadenados que hablan de los años y los sueños perdidos con un tono de tristeza que cala como la niebla en invierno, hasta los huesos.

La letra completa
En la posada del fracaso donde no hay consuelo ni ascensor
El desamparo y la humedad comparten colchón
Y cuando por la calle pasa la vida como un huracán
El hombre del traje gris saca un sucio calendario del bolsillo
Y grita: "¿Quién me ha robado el mes de abril? ¿Cómo pudo sucederme a mí?
¿Quién me ha robado el mes de abril? Lo guardaba en el cajón donde guardo el corazón"

La chica de BUP casi todas las asignaturas suspendió
El curso que preñada aquel chaval la dejó
Y cuando en la pizarra pasa lista el profe de latín
Lágrimas de desamor ruedan por las páginas de un bloc
Y en el escribe: "¿Quién me ha robado el mes de abril? ¿Cómo pudo sucederme a mí? Pero, quién me ha robado el mes de abril
Lo guardaba en el cajón donde guardo el corazón".

El marido de mi madre en el último tren se marchó
Con una peluquera veinte años menor
Y cuando exhiben esas risas de instamatic en París
Derrotada en el sillón se marchita viendo Falcon Crest mi vieja, y piensa:
"¿Quién me ha robado el mes de abril? ¿Cómo pudo sucederme a mí?
¿Quién me ha robado el mes de abril? Lo guardaba en el cajón donde guardo el corazón".

Joaquín Sabina, protagonista ausente de un documental




Joaquín Sabina, protagonista ausente de un documental

ATRESplayer Premium debuta hoy en la Argentina con “Pongamos que hablo de Sabina”, el documental de Alberto del Pozo sobre el cantautor andaluz, quien no participó de la producción.

MAYO 26, 2020 12:15 AM

Joaquín Sabina verá cómo sus amigos, y hasta ex novias, cuentan su historia.
Con el estreno de la serie documental “Pongamos que hablo de Sabina”, su primera producción propia centrada en el aclamado cantautor, la plataforma española ATRESplayer Premium desembarca en la Argentina.

Las pasiones que la obra de Sabina despierta de este lado del Atlántico parece haber sido la excusa perfecta para que ATRESplayer Premium se lance en la Argentina donde el especial acerca del trovador nacido en Úbeda hace 71 años puede hallar una audiencia fascinada.

Además el perfil humano del músico y poeta se delinea gracias a una galería de voces que integran, entre otras, Ana Belén, Wyoming, Leiva, Vanesa Martín, Pablo López, Álvaro Urquijo, Alejo Stivel, Pancho Varona, Pablo Iglesias, Celia Villalobos, Esperanza Aguirre, Almudena Grandes, Patxi López, Enrique Cerezo y Fernando Sánchez Dragó.

El documental conducido por Iñaki López y dirigido por Alberto del Pozo se despliega en tres capítulos donde se explora el lado más personal de Sabina con abundante material inédito entre el que destaca la charla con Cristina Zubillaga, novia y musa del artista.

Autor de exitosas piezas como “Contigo”, “Quién me ha robado el mes de abril”, “Con la frente marchita”, “A la orilla de la chimenea”, “La canción más hermosa del mundo”, “Ruido”, “Lo niego todo”, “Nos sobran los motivos” y “Amor se llama el juego”, por citar sólo algunas, esta serie llega en un momento particular de su vida.

Sabina tuvo un un hematoma intracraneal tras caerse del escenario del WiZink Center madrileño el 12 de febrero en uno de los shows de la gira “No hay dos sin tres” que lo reunió nuevamente con Joan Manuel Serrat y que había comenzado en noviembre en la Argentina.

Pero, además, el músico fue tributado por una diversa galería de colegas en el álbum doble “Ni tan joven ni tan viejo” que se ubicó a distancia de otras tres celebraciones que mereció esa producción de más de cuatro décadas y una veintena de placas (a cargo de mujeres, de artistas cubanos y de cultores del flamenco).

El director Del Pozo dialogó con Télam acerca del carácter del programa que lanza el área de documentales de la plataforma y de la figura de Sabina.

Sabina, décadas atrás.
P- ¿Qué desafíos le planteó como director el armar el collage que propone “Pongamos que hablo de Sabina”?

R- El gran reto fue organizar un documental dividido en tres capítulos para contar la vida de Joaquín Sabina sin caer en la narración cronológica habitual de este género. En ese sentido, establecer tres grandes temas fue crucial para armar ese collage. Los pecados, los amores y las pasiones son ejes sobre los que se puede construir un retrato de la vida y la obra de Sabina desde sus inicios hasta hoy. Lo más interesante, sin duda, ha sido realizar este documental sin contar con el propio protagonista… algo poco usual en este género pero que ha resultado de lo más interesante porque me ha permitido acercarme a un Sabina íntimo y personal, de anécdotas y curiosidades que creo ni él mismo recuerda. Así, por ejemplo, su primer grupo, los Merry Youngs, nos han contado cuál fue la primera ‘composición musical’ de Sabina cuando apenas tenía 14 años… incluso nos la cantan en el documental… una joya para los que amamos la música de Joaquín.

P- ¿Cuál es su relación con la obra de Sabina?

R- Me he acercado a la obra de Sabina con el máximo respeto y admiración. Y tras finalizar las más de 30 entrevistas hechas en este documental, recuperar actuaciones de toda su carrera y escuchar cientos de entrevistas que el propio Sabina ha concedido a diferentes medios de comunicación he podido revisar su discografía y “ponerme en la piel” del Sabina de los 80, los 90, los 00… y comprender mejor sus letras, su historia y su vida, porque como nos dice Leiva “Joaquín es el mejor retratista de sí mismo”, y como afirma Almudena Grandes “Joaquín marcó un antes y un después en la forma de escribir canciones en nuestro país”. El equipo de guionistas del programa (Manuel Guerrero y Eva Pérez) y un servidor, hemos podido comprobar la vigencia de sus letras 40 años después de publicarlas.

P- Sabina es muy querido y admirado en la Argentina pero el documental muestra el impacto del artista en su tierra ¿Qué podría decir de lo que significa Sabina en España?

R- El propio Pancho Varona cuenta en el documental, a raíz de las cancelaciones de algunos conciertos de Sabina, que “la gente no protesta. Yo salgo al escenario, digo que Joaquín no puede continuar el concierto, y la gente no protesta, se va ordenadamente. Creo que se merecen que bajara del escenario les diera un abrazo a cada uno y les dijera: gracias”. En España es admirado y respetado tanto por sus compañeros, como por la crítica y el público. Una de las cosas que más me ha fascinado descubrir en palabras de todos sus amigos y compañeros es la tremenda generosidad de Sabina con todos ellos. Y su fidelidad a sí mismo, es decir, Joaquín es como es, sin trampa ni cartón.

P- ¿Qué característica resalta de la personalidad de Sabina más allá de su obra?

R- Él habla, cuenta, dice lo que piensa y lo que siente sin importar si es políticamente correcto o no. Y creo que esa lealtad a su forma de ser y de pensar, algo que en nuestros días está en desuso por la “tiranía de lo políticamente correcto” hace que la gente lo respete, lo valore y lo admire. De hecho, Sabina genera simpatías en todos los partidos políticos de España, se lleva bien con músicos de toda la vida y con figuras emergentes… es un imán para todos, y una esponja que escucha y absorbe lo bueno de cada una de las personas con las que se rodea.

El invitado que no fue
Alberto del Pozo, director de la serie documental “Pongamos que hablo de Sabina” considera que la ausencia del músico en la historia se debió al “fatídico accidente que tuvo a principios de 2020”.

“Joaquín Sabina fue el primer invitado a participar en este documental. Lamentablemente, su gira por Latinoamérica, sus compromisos en España y su fatídico accidente a principios de 2020 le impidieron participar y eso hizo que tuviéramos que ser más originales a la hora de crear la narrativa del documental”, asegura Del Pozo a Télam.

Pese al contratiempo, el director arriesga que “el resultado es incluso más interesante, porque buceamos en el recuerdo y las anécdotas de gente cercana a Sabina que, en algunos casos, es la primera vez que hablan para una cámara de televisión. Es el caso, por ejemplo, de Cristina Zubillaga, la protagonista de ‘19 días y 500 noches’”.

Del Pozo había dirigido anteriormente un capítulo del programa “El Legado” dedicado a Sabina que puede verse por YouTube y que considera “la primera pieza para esta serie documental”.

Télam

lunes, mayo 25, 2020

Cristina Zubillaga: habla por primera vez la exnovia de Joaquín Sabina que inspiró ‘19 días y 500 noches’



Cristina Zubillaga: habla por primera vez la exnovia de Joaquín Sabina que inspiró ‘19 días y 500 noches’

La modelo aparece en la serie documental ‘Pongamos que hablo de Sabina’, ya disponible en ATRESplayer Premium.

Cristina Zubillaga habla por primera vez de su relación con Joaquín Sabina (ATRESMEDIA.)

REDACCIÓN, BARCELONA 25/05/2020 11:36 | Actualizado a 25/05/2020 17:53

“Lo que duran dos peces de hielo en un whisky on the Rocks”, algo más se extendió el romance entre Joaquín Sabina y Cristina Zubillaga, la mujer que inspiró la venganza hecha canción en la que el cantante reconoce que esa mujer le dejó “el corazón en los huesos” y de rodillas.

El documental Pongamos que hablo de Sabina, estrenado el pasado fin de semana en ATRESplayer Premium, dio voz por primera vez a la modelo que inspiró el famoso tema del flaco de Úbeda 19 días y 500 noches . Cristina Zubillaga, que según Sabina, “siempre tuvo la frente muy alta, la lengua muy larga y la falda muy corta”, era una modelo mallorquina asidua en la noche de la movida madrileña que a finales de los años 80 empezó un romance con el músico.

“Yo era la antimodelo. Éramos un grupo de amigas modelos que no nos cuidábamos mucho, trasnochábamos mucho… Teníamos un grupo de amiguitos intelectuales, algún guionista, gente del cine”, cuenta Zubillaga el primero de los tres capítulos del documental conducido por Iñaki López.

Sabina compartía su vida y dos hijas con Isabel Oliart

Sabina vivía con la madre de sus hijas, Isabel Oliart, y una noche de sarao conoció a Cristina. Yo era un poco loquita de la noche, me perdía de mis amigas y en una de esas aparecí sola en Amnesia (Madrid) y estaba sola en un rincón tomando una copa. Vi a Joaquín y se acercó porque yo creo que le acosé un poco mirándole y me dijo: ‘¿Quieres tomar una copa?’. Le dije que sí y así siguió todo”, ha explicado de su primer encuentro.

Cristina Zubillaga. (ATRESMEDIA)
El romance fugaz fue convirtiéndose en algo más serio, que como explicó años después Sabina, incluso llegó a coincidir en el tiempo con su relación estable con Isabel. Para él, Cristina la principio era “solo una tía buena” pero poco a poco se fueron conociendo, “hasta que un día cogió el teléfono, me llamó y me dijo: ‘Bueno, aquí hay algo más’”. Entre sus muchas escapadas, la llevó a Cuba, donde se reunieron de madrugada con Fidel Castro.

Cristina destaca de Sabina su “caballerosidad”. “Era muy atento. Esa noche fuimos a casa de Pancho y acabamos juntos, tuvimos una química muy buena” ha contado ella.

Las llaves de la casa de Sabina
Al parecer Cristina empezó a del ritmo de vida de Sabina tras un tiempo viviendo juntos. Allí es donde revive la leyenda de las llaves de la casa de Sabina, que las daba a muchos de sus amigos para que entrasen y saliesen cuando gustasen.

“Era muy desagradable. Allí me encontré de todo. Quería matar a Joaquín. Me levantaba y me encontraba a gente en la casa: ‘No, es que estoy aquí para enseñarle la casa de Joaquín a esta amiga’, me decía uno. ¡Que era mi casa! Yo salía en camisón. Menos mal que siempre he sido muy presumida e iba muy arregladita”, ha contado de ese episodio.

Su relación llegó al final durante una estancia en Menorca, en la que Cristina decidió marcharse. De repente en una cena, “la chica que yo conocía desapareció, pero desapareció entre la sopa y el postre”, contó años después Sabina. Y “tanto la quería que tardé en aprender a olvidarla, 19 días y 500 noches”.

domingo, mayo 24, 2020

El elenco del musical de Joan Manuel Serrat espera el estreno cantando uno de sus clásicos

El elenco del musical de Joan Manuel Serrat espera el estreno cantando uno de sus clásicos

Los protagonistas del proyecto encabezado por el argentino Ariel del Mastro transmitieron un mensaje de esperanza con una versión de Hoy puede ser un gran día.

24/05/2020

El proyecto estaba listo para estrenarse en el teatro Nuevo Apolo de la Gran Vía, en Madrid en estos días, luego de varios meses de trabajo. Pero como sucedió con casi todo, quedó suspendido por la pandemia de coronavirus. Inspirado en la famosa canción de Joan Manuel Serrat​, Aquellas pequeñas cosas, el musical con canciones del catalán tiene libro de Jordi Galcerán, dirección del argentino Ariel del Mastro y producción de su compatriota Julia Gómez Cora. Los actores que forman parte de su elenco no pudieron ni siquiera completar los ensayos porque se declaró la cuarentena en España.

CANTARES - Joan Manuel Serrat - Canticum Meru (coro virtual)

Habla por primera vez Cristina, la protagonista de '19 días y 500 noches': "Quería matar a Sabina"






Habla por primera vez Cristina, la protagonista de '19 días y 500 noches': "Quería matar a Sabina"

Joaquín Sabina y Cristina Zubillaga, en una de las imágenes del nuevo documental del artista.

El documental 'Pongamos que hablo de Sabina' se estrena hoy: hablan sus amigos de sus vicios, sus pánicos y sus generosidades, y lo mejor: habla la modelo que le hizo componer su mejor disco.

24 mayo, 2020 02:36

Sabina lidera un himno contra el Covid-19 con 20 artistas: "Supervivientes, sí, maldita sea"
La historia detrás de 'Quién me ha robado el mes de abril': la canción de Sabina contra el Covid-19
“Cuando se despertó no recordaba nada de la noche anterior”, dice Donde habita el olvido, uno de los temas más hermosos del maestro de Úbeda -el del bombín, ya saben: el crápula, el poeta, el nocturno, el alevoso, todo aquel arquetipo que ya le cansa-, y bien podría servirle de autobiografía. Una autobiografía tediosa, en realidad: la del ser brillante y poliédrico que ha sido reducido a su canallismo, la del hombre que lo vivió todo casi sin recuerdos nítidos. Hace bien: bastante tenemos ya con cargar con los años memorizados.

Ese es el poso que queda tras ver Pongamos que hablo de Sabina, nuevo documental original de ATresplayer Premium, que se estrena este mismo domingo 24 de mayo. Parece ahí que la vida del genio ha sido como un golpe en la cabeza, como una huida hacia adelante, como un navegar errante por los ríos de la indignación -y la devoción- pública.

El documental hace demasiado hincapié en que Joaquín tiene la sed del mundo, una sed bestial e inagotable para cerrar tabernas, para vaciar tequilas, para acumular resacas, para fallar a sus compromisos porque está alargando un guateque, para cantarse otra ranchera, para esnifar lo próximo. Es el cuento de un adicto. Fuera estigmas. A estas alturas del partido no nos sorprende, pero de alguna manera lo relatan como si fuese algo extravagante o condenable moralmente: pensábamos que en 2020 ya habíamos superado esos juicios de puritanos.

Sabina: drogas y depresiones

“Todas las drogas deberían ser legales”, dice Sabina en una entrevista antigua. “Yo soy un fumador y entiendo muy bien a Maradona cuando dice que un drogadicto lo sigue siendo siempre”. Claro. Él cree, como Ray Loriga, que “cada vez que uno abandona un vicio, el demonio gana un alma”, y su relato genuino ha funcionado durante décadas porque es un artista que está siempre recuperándose de algo, un artista instalado en la línea en la que confluyen el placer y el dolor, un artista que entiende que la vida mata pero pelea por salvarse sin soltar la copa, y todo eso apela a lo más profundo de la experiencia humana.

Lo canta a voces él mismo: no es una víctima, no lo fue, sí un “superviviente, maldita sea”. Y nunca se cansará de celebrarlo. Esta obra revisa debates obsoletos, como el de la pertinencia de su discurso politoxicómano, y como espectadores a este lado nos quedamos un poco fríos.

“Algunos comunicadores criticaban a Joaquín Sabina porque hablaba explícitamente de las drogas, de los consumos y demás”, dice su amigo Baltasar Garzón. “Para mí ninguna de sus canciones es un enaltecimiento de algo más que de la tolerancia, de la libertad, de la autonomía y de la voluntad. Se ha expresado siempre como creía”. Sólo faltaría que tan entrados en el milenio alguien tuviese de testiculario de hacerle rendir cuentas a Sabina por las rayas pintadas. Qué infantilismo sólo en el planteamiento.

Más interesante resulta cuando su amiga Almudena Grandes habla de sus depresiones. “Es un hombre depresivo. Él habla con naturalidad de esto. Cuando está deprimido, no sale de casa, no ve a gente, está todo el tiempo en la cama… No es amigo de ir al médico y menos al psicólogo. Cuando le dices: ¿por qué no vas?, él te dice ‘porque soy de Úbeda”, explica la escritora. “Es un depresivo que ha convivido durante tantos años con su depresión que prácticamente es una compañera de viaje. La torea bastante bien”.

Cristina Zubillaga
¿Hay un Sabina más allá de sus clubs de putas, de sus whiskerías, de sus heterodoxias, de sus pánicos escénicos, de sus achaques de vividor? Es cierto que de un personaje así, tan explotado mediáticamente, tan forjado como leyenda popular, ya parece complicado contar cosas nuevas, pero ese es el reto: no publicar más contenido de relleno.

En este sentido, el documental sí aporta algo valioso -además de las voces expertas del biógrafo Javier Menéndez Flores y de compadres suyos como Ana Belén, Wyoming, o Pancho Varona-: habla por primera vez Cristina Zubillaga, “la mujer que conoció a finales de los ochenta y que inspiró algunas de sus mejores canciones, como 19 días y 500 noches”. Cristina fue una liberación dentro de la liberación en aquellos años expansivos, postfranquistas, felices, rebeldes, hedonistas hasta decir 'basta' para acallar las décadas de represión.

Sabina había regresado de su exilio en Londres en 1976 y se había instalado en Madrid: a caballo entre un hogar que compartía con la madre de sus hijas, Isabel Oliart, y una curiosidad infinita por la ciudad y sus posibilidades. Ahí apareció Zubillaga, como una tentación que nunca le fue del todo asible.

Cristina Zubillaga.

Lo nuestro duró

Lo que duran dos peces de hielo

En un whisky on the Rocks

En vez de fingir

O estrellarme una copa de celos

Le dio por reír

De pronto me vi

Como un perro de nadie

Ladrando a las puertas del cielo

Me dejó un neceser con agravios

La miel en los labios

Y escarcha en el pelo.

Saluda Cristina desde La Mordida, en Madrid, el restaurante mexicano -hoy propiedad de Sabina- que ella frecuentaba cuando era cafetería. Parece que fue hace siglos. “Era un poco locura. Éramos un grupo de modelos, yo estaba en Madrid, era modelo… pero la ‘antimodelo’, porque mis amigas y yo salíamos mucho y no nos cuidábamos. Trasnochábamos. Teníamos un grupo de amiguitos intelectuales, algún guionista, gente del cine…”, relata. ¿Y cómo conoció a Joaquín?

“Fue una noche de las mías. Yo era un poco loquita de noche. Me perdía de mis amigas y un día aparecí sola en Amnesia, que estaba en la Castellana. Estaba sola en un rincón, tomando una copa o no sé muy bien qué hacía, en qué perdía yo el tiempo allí…”, rememora, con lagunas. “Vi a Joaquín. No sabía muy bien quién era, la verdad. Se acercó porque yo le miraba, le acosé un poco, yo creo. Me dijo: ¿quieres tomar una copa? Yo dije que sí, que claro. Me tomé una copa con él y la noche siguió”, esboza.

Tenían razón

Mis amantes

En eso de que, antes

El malo era yo

Con una excepción

Esta vez

Yo quería quererla querer

Y ella no

Así que se fue

Me dejó el corazón

En los huesos

Y yo de rodillas

Desde el taxi

Y, haciendo un exceso

Me tiró dos besos

Uno por mejilla.

Cristina destaca de Sabina su “caballerosidad”, sus dotes de “atención”. “Era muy atento. Esa noche fuimos a casa de Pancho y acabamos juntos, tuvimos una química muy buena, todo…”, esgrime, en referencia a su primer encuentro sexual. “Pero a mí lo que me gustó, aparte de eso, es que a pesar de todo, hubo sus tiempos, su historia. Y yo dije: mira qué hombre. Le escuchaba y decía: qué majo, cómo habla”.

La casa de las mil llaves
Ella reconoce que “yo para él era una tía buena modelo, y además lo decía: estaba buenísima, me voy con esta tía buena”. “Lo decía en reuniones, hasta que un día cogió el teléfono, me llamó y me dijo: ‘Bueno, aquí hay algo más’”. Aunque ella no lo detalla en la grabación, cuentan los mentideros que Sabina quedó tan prendado de la modelo mallorquina que se la llevó a Cuba a seguir la fiesta. Allí, ella lo acompañó a una reunión de madrugada con Fidel Castro, quien llegó a bromear con el cantante sobre cómo conseguir el número de teléfono de su pareja.

Lo cierto es que, una vez pasado el furor inicial, Joaquín acostumbraba a pasar un poco de las chicas y a centrarse más en amanecer en el sofá con sus colegas después de verbenas infinitas. Así lo cuenta la propia Cristina: aquello era un cachondeo insoportable. Sabina era -siempre ha sido- tan extremadamente abierto y generoso que daba las llaves de su casa a muchos de sus amigos para que entrasen y saliesen con quien quisiesen, a su antojo.

Entre ellos, el estupendo Boyero, que también aparece en este documental: “Era muy placentero; yo vi cómo mi amigo Antonio Oliver y él compusieron 19 días y 500 noches, que es una obra maestra… aquello era un lujazo: yo poniéndome ciego de copas y de otras cosas y viendo cómo hacían su trabajo", relata.

Pero para Zubillaga era demasiado. “Era muy desagradable. Allí me encontré de todo. Quería matar a Joaquín. Me levantaba y me encontraba a gente en la casa: ‘No, es que estoy aquí para enseñarle la casa de Joaquín a esta amiga’, me decía uno. ¡Que era mi casa! Yo salía en camisón. Menos mal que siempre he sido muy presumida e iba muy arregladita, pero era como… ¿y?”.

Y regresé

A la maldición

Del cajón sin su ropa

A la perdición

De los bares de copas

A las cenicientas

De saldo y esquina

Y, por esas ventas

Del Fino La Ina

Pagando las cuentas

De gente sin alma

Que pierde la calma

Con la cocaína

Volviéndome loco

Derrochando

La bolsa y la vida

La fui, poco a poco

Dando por perdida.

El arresto domiciliario y el ictus
Cuenta Cristina que, como Joaquín estaba de arresto domiciliario, tenían que hacer las fiestas en casa. “Fue una Nochebuena. Una fan le acosaba y le acosaba y Joaquín dijo ¡ay, déjame!, y debió darle sin querer con el vaso o algo. La chica le denunció. Fue un accidente. Un mes de arresto domiciliario. Venía la Policía a comprobar que no se lo saltara”, evoca.

Ella no aguantó esa vida y acabó pirándose a su Mallorca natal -contó Joaquín en una ocasión que le dio un 'brote' y que lo dejó de la noche a la mañana durante una estancia en Menorca-, pero cuando se enteró de que le había dado un ictus, “en una hora estaba en el aeropuerto y me cogí un avión para ir a verlo”.

“Me daba igual todo. Me presenté allí, me puse a los pies de la cama. Estaba la madre de sus hijas y Jimena, y dije: aquí estoy yo, me dais igual todas”. “Qué tensión para Joaquín cuando abrió los ojos, ¿no?”, le dice Iñaki López, que conduce el documental. “Sí, sí, fue muy curioso… porque no me dejaban entrar, no por nada… y Jimena me dijo: ¿cuándo te marcharás? Y yo dije: cuando vea a Joaquín. Si es hoy, hoy, si es mañana, mañana. En cuanto lo vea me marcho. Ahí entré y me dejaron verlo. Y me fui".

Dijo hola y adiós

Y, el portazo sonó

Como un signo de interrogación

Sospecho que así

Se vengaba, a través del olvido

Cupido de mí

No pido perdón

¿Para qué? Si me va a perdonar

Porque ya no le importa

Siempre tuvo la frente muy alta

La lengua muy larga

Y la falda muy corta.

Los pecados de Joaquín Sabina, según sus amigos: se estrena el documental que muestra su lado más personal

Los pecados de Joaquín Sabina, según sus amigos: se estrena el documental que muestra su lado más personal

El documental 'Pongamos que hablo de Sabina', se estrena en la plataforma de pago de Atresmedia este domingo 24 de mayo

SUSANA ELGUEA 24/05/2020 - 06:00 h. CEST

Joaquín Sabina está presente en el confinamiento en España como los ojos del Guadiana; no sale de su casa desde que recibió el alta, a finales de febrero, tras ser operado de un hematoma intracraneal tras su caída al foso durante un concierto en Madrid el 12 de febrero, el mismo día que cumplía 71 años, pero, como el río, reaparece al llegar abril. Media España se dio cuenta de que esto del coronavirus nos había robado el mes de abril… y ahí estaba Sabina con su profética letra de 1988. La canción, un tema que encadena historias de perdedores, ha sonado en radios, televisiones y balcones para amenizar el encierro en casa como augurio poético de lo que el estado de alarma nos dejó. Incluso una veintena de artistas versionaron ese tema de Sabina para recaudar fondos para Médicos Sin Fronteras en la lucha contra el COVID-19.

Sabina volvió a aparecer, sin moverse de su casa en la plaza de Tirso de Molina de Madrid, con las versiones de un matrimonio confinado en Vigo que cambió la letra de 19 días y 500 noches para cantar Tropecientos días y otras cuantas noches; y volvimos a recordarle, cuando Los Secretos y Pancho Varona unieron en una versión para la historia de la música en España el Ojos de Gata de los hermanos Urquijo y el Y nos dieron las diez de Joaquín Sabina.

El Sabina canalla, generoso y golfo

Ahora ese caudal de letras, música y poesía retrato de la historia de España que es Joaquín Sabina regresa en forma de documental en tres capítulos que la plataforma de pago de Atresmedia estrena este domingo 24 de mayo. Este primer documental de producción propia de Atresmedia nos muestra a un Joaquín Sabina visto con la mirada de sus amigos, que hablan de un tipo sin pelos en la lengua, canalla, generoso, desinhibido y licenciado en golferío.

El documental está dirigido por Alberto del Pozo. Ha pasado un año trabajando en este proyecto al que llegó siendo “poco Sabinista”, según cuenta en conversación con la SER. “Yo conocía más al personaje que al cantante, pero ahora soy sabinista a muerte”. Del Pozo defiende que, desde esa posición neutral, ha logrado un producto que, por un lado no defraude a los fans del cantautor y, por otro, guste a los que no conocen la música de Sabina. Desde esa “mirada limpia” de Alberto del Pozo surge un documental que recorre la vida “del autor de los autores en España”. “Su vida es apasionante, él lo ha contado todo… sus adicciones, sus amores, su pasión por los toros, su alma colchonera…”, explica el director.

Sin embargo, en estos tres capítulos no aparece Joaquín Sabina. Se ha intentado, pero los problemas de agenda, nos cuenta Del Pozo, sumados al accidente del concierto de Madrid en febrero y la llegada del estado de alarma en marzo, lo han hecho imposible. “Hemos perdido algo, pero al mismo tiempo hemos ganado mucho. Su ausencia da valor al documental porque él ya lo ha contado todo de su vida y es mejor que hablen sus amigos”.

Del arresto domiciliario a la depresión
Y vaya si hablan sus amigos. En cada capítulo, de media hora de duración, descubrimos sus pecados, las drogas, el arresto domiciliario, los clubs de alterne… en las voces de Ana Belén, el Gran Wyoming, Leiva; y de personas que por primera vez cuentan delante de una cámara su historia de amor con Sabina, como Cristina Zubillaga. Ella es la protagonista de 19 días y 500 noches, y se queja de la letra de la canción: “Yo no le abandoné como se abandonan los zapatos viejos”. Por ella nos enteramos cómo era el Sabina de los años 80 y el por qué esos años medio Madrid tenía llaves de su casa para acudir a fiestas cada noche. El crítico de cine Carlos Boyero y el músico Alejo Stivel eran habituales de esas noches de copas y crear creación de temas.

Su guitarrista, Pancho Varona, cuenta emocionado cómo vivió la noticia del ictus que sufrió Sabina en 2001, que luego acabó en una depresión de la que habla con mucha naturalidad con Almudena Grandes. “Torea la depresión bastante bien porque es una compañera de viaje”, cuenta en el documental la escritora madrileña. Otro de los momentos más altos del primer capítulo es oír a Ana Belén relatar el “miedo” que vio en Joaquín al subir junto a ella en un concierto en Madrid que suponía su regreso al escenario tras el ictus. Juntos cantaron A la sombra de un león, imágenes que recoge el documental con la narración de la cantante madrileña.

Atresmedia recupera resúmenes de entrevistas del propio artista en las que cuenta cómo salió del ictus y la depresión y dejó atrás la coca y otros excesos, y volvió a enfrentarse con el agujero en 2014 cuando un ataque de pánico impidió que acabase un concierto en su ciudad fetiche, Madrid, que remedió con otro directo para la historia en el mismo escenario. El miedo a defraudar se quedó desde entonces en su cabeza.

En el documental se volverá a reunir el primer grupo que tuvo Sabina, en su Úbeda natal, cuando tenia 16 años. Era uno de los guitarras de Merry Young, y podremos verles volver a interpretar la primera letra que Sabina escribió con ellos. “Cuando Joaquín vea el documental recordará cosas de su vida que no recuerda”, señala Alberto del Pozo.

El documental que se estrena este domingo es imprescindible para seguidores del flaco de Úbeda pero también para quien quiera descubrir en la vida de Joaquín Sabina una historia apasionante, que al mismo tiempo es la historia popular de España desde los años 70 hasta la actualidad. Es un recorrido por todo el archivo audiovisual del artista, incluyendo material inédito, una canción grabada en cassette en su época de Londres que nunca ha visto la luz y fotografías inéditas cedidas por Javier Salas, el fotógrafo autor del desnudo integral de Joaquín Sabina. Otro de los atractivos del documental es el cierre de cada capítulo: Zahara, Salvador García Pitu y Pablo López los cierran con tres versiones muy especiales de Sabina. Pongamos que hablo de Madrid, Contigo y Quién me ha robado el mes de abril.

La vida de Joaquín Sabina, en serie

La vida de Joaquín Sabina, en serie

Ya está en marcha la serie sobre Joaquín Sabina, con Fernando León de Aranoa como director. También habrá un documental.

24/01/2019

Endemol Shine Boomdog, BTF Media y Sony Music España se unen para desarrollar una serie dramática original basada en la vida del afamado músico español Joaquín Sabina. Además, junto a Reposado Producciones, producen un documental que se estrenará en el 2020.

El aclamado director y guionista Fernando León de Aranoa, conocido por sus películas españolas como Barrio y Los lunes al sol, se ha unido al documental como director y coproductor y actualmente se encuentra en conversaciones para unirse a la serie original. Endemol Shine Boomdog, BTF Media y Sony Music España producirán y distribuirán conjuntamente la ficción.

Oriol Uria, CEO de BTF Media España, afirmó: “Desde el primer día en que empecé a trabajar con Sony Music España para crear un proyecto con Sabina, algo cambió en mi vida. Esa es la magia de Sabina. Sabina no sólo es un gran artista, sino que sin dudas también es una persona muy generosa”, dijo Uria. “Que Endemol Shine Boomdog aceptara nuestra invitación para unirse a un proyecto tan especial como este no sólo ha sido un honor, sino que también ha hecho de esta experiencia algo más emocionante”. Uria agregó: “A veces la vida te hace muchos regalos y que Fernando se uniera al proyecto fue uno de esos regalos extraordinarios. Es una experiencia fantástica poder ver a artistas como Sabina y Fernando trabajar juntos”.

“Estamos encantados de asociarnos a BTF Media y Sony Music España para contar la increíble historia de vida de Joaquín Sabina a través de una serie dramática original y también con un documental”, señala el CEO de Endemol Shine Boomdog Alejandro Rincón. “Y es grandioso poder contar con un aclamado director, productor y guionista como Fernando participando junto a nosotros en este proyecto. La fenomenal experiencia de Fernando y su relación cercana con Joaquín lo convierten en el integrante perfecto”.

José María Barbat, presidente de Sony Music España, comentó: “Joaquín Sabina es uno de los artistas principales de Sony, con una carrera difícil de igualar en nuestro país y en toda la región. Teníamos que desarrollar un proyecto con él, en especial en su cumpleaños número 70. Estamos encantados de celebrarlo junto a él”. También agregó: “Durante años barajamos la idea de desarrollar un documental, al que ahora se une felizmente este proyecto de la serie biográfica. Estamos entusiasmados por ambos proyectos, que sin dudas aportarán a la vida de Joaquín de un nuevo modo: llevando su obra a nuevas audiencias junto a sus fans de siempre, mediante nuevas plataformas y con los mejores socios posibles. Este es un proyecto excelente que confirma la apuesta de la compañía por contenido original de la más alta calidad. Me gustaría agradecerle personalmente a Joaquín por su confianza al abordar una tarea de esta magnitud y a Sergi y Oriol por la pasión y el afecto que colocaron en él”.

Sergi Reitg, director de contenido de Sony Music España se unió a Barbat en su entusiasmo: “Desde que asumí el desafío de lanzar el área de contenido premium para Sony Music España, el objetivo principal era desarrollar, entre otras cosas, películas biográficas de artistas de primer nivel, con un enfoque internacional (en especial para el público hispanoparlante), con la mejor calidad de producción y los mejores socios del sector. La serie biográfica de Joaquín Sabina es el proyecto ideal para este objetivo y el tipo de producciones que desarrollaremos en los próximos años en Sony Music España. También estoy muy contento porque Joaquín y su entorno, se han implicado completamente en el proyecto, lo que es un privilegio, y nos permitirá producir un proyecto de éxito”.

Sabina, uno de los cantautores más influyentes de la historia moderna española, nació en Úbeda, España, en 1949. En 1970, fue exiliado a Londres por razones políticas y permaneció allí durante siete años. Cuando regresó a España después de la muerte de Franco, Sabina comenzó a tocar en pequeños bares en Madrid y luego grabó su primer disco Inventario. Sabina rápidamente se convirtió en una gran estrella tanto en España como en Latinoamérica y lanzó más de 20 discos vendiendo millones de copias durante su carrera ilustre. Su álbum 19 días y 500 noches vendió más de un millón de opias.

La historia sobre la vida de Sabina cuenta con muchos elementos distintos: amor romántico, pasión, el amor prohibido, emociones fuertes, peligro, todo tipo de excesos, amistades con personas desconocidas y marginales, amistades con personalidades notables, un amor profundo por la libertad y, sobre todo, vivir la vida a su manera. Como consecuencia de vivir en el lado salvaje, Sabina sufrió un derrame cerebral debilitante en el 2001 que casi le costó su vida. Desde entonces se ha recuperado y vuelto a trabajar, recorriendo y lanzando su última producción discográfica, Lo niego todo.

León de Aranoa, nativo de Madrid, ha recopilado un cuerpo impresionante de trabajo a través del cine y la televisión, ganando numerosos elogios a lo largo de su carrera. Su innovadora película del 2002, Los lunes al sol, protagonizada por Javier Bardem, ganó el premio Concha de Oro en el Festival Internacional de cine de San Sebastián y cinco premios Goya.

En 1998, León de Aranoa escribió y dirigió la película Barrio, un retrato de la vida de tres jóvenes adolescentes en un barrio español muy pobre. La película fue presentada en el Festival de San Sebastián, donde León de Aranoa obtuvo el premio Concha de Plata al mejor director. Barrio también recibió numerosos honores, entre ellos el Premio FIPRESCI, el Fotogramas de Plata a la mejor película española, el premio José María Forqué, el Sant Jordi y el Turia, entre otros. Sus películas recientes incluyen Princesas (2005), Invisibles (2007) y Amador (2010). León de Aranoa consiguió su inicio trabajando como guionista en la televisión española, trabajando en series como Un, dos, tres... responda otra vez y bocetos de comedia para Martes y Trece.