Entrevista con Facundo Cabral

Entrevista con Facundo Cabral

12/07/2011


Como inolvidable podría ser descrito el encuentro que el equipo de este trisemanario sostuvo con el intérprete de "Yo vengo de todo el Mundo", en el hotel donde se hospedó durante su estancia en Quetzaltenango. Pese a su delicado estado de salud, Facundo Cabral transmitía mucha paz y sus palabras nunca perdieron convicción, fuerza y amor por la vida.

Compártanos alguna anécdota que haya vivido con el público.
“He tenido público muy diverso del que me he preguntado cómo conoció mi música. Desde el Sahara hasta la Sierra Madre de Chihuahua, donde los taraumaras bajaban a escucharme y a los que se quedan fuera se les ponía un parlante. Tener en la plantilla a la Madre Teresa o que otro mande a grabar tus conciertos. He tenido en el público a guerrilleros y hasta algún dictador que le
gusta mi música.

Una vez en Bruselas –Bélgica- canté en un teatro que tenía al frente un burdel muy famoso. Llegaron como cien prostitutas a escucharme y a su lado se sentaron cuatro monjas, una de ellas de la Orden de la Madre Teresa. Es maravilloso, porque en el teatro se junta gente de todo tipo, ricos, pobres, buenos y malos. Es una gama tan heterogénea la que me escucha.

A mis amigos –Joan Manuel- Serrat y Alberto Cortez, les sorprendió que no me echara –Francisco- Franco de España y la respuesta la encontré como hace dos o tres años cuando al terminar un programa de televisión en Sevilla una señora que había estado escuchando atentamente se acercó a saludarme y me dijo: ‘Es conmovedor para mi saludarlo, porque cuando yo era niña mi abuelo me sentaba en su espalda y me decía, escucha a este señor, este es un hombre’. Y cuando le pregunté a la señora quien era su abuelo me dijo que Franco.
Pero también me han echado de varios países y he enojado a mucha gente como Fidel, Pinochet y a Chávez…

¿Qué ha percibido de Quetzaltenango y su gente?
“Siempre tuve gran curiosidad por estas tierras, esperaba tener muchos amigos y mucho afecto aquí, principalmente por el mundo indígena. Sigo pensando que Centroamérica es una reserva espiritual maya, porque el mejor ser humano que podes encontrar en el mundo anda por esta zona. La gente es muy dedicada, muy respetuosa y el paisaje..."

Cómo amante de la vida, ¿qué mensaje puede enviar a los guatemaltecos?
“No, no, no, en general no se puede hablar. Como dicen los argentinos, yo no me siento incluido, somos individuos y cada uno es cada cual... No creo en las nacionalidades ni en los grupos, creo en el individuo.
Y consejos no puedo dar porque tendría que ser un profeta o un filósofo, pero tengo una sugerencia, eso sí. Hacé lo que amas, lo peor es que familia, políticos o religión te quieran marcar el camino. Tenés que hacer lo que te dicta el corazón para llegar a ser feliz. Tenés que ser libre, tener la vida en tus manos y no seguirte de rebaños. No podés ser feliz si no sos libre y para ser libre tenés que conocerte. Si hacés eso la vida valdrá la pena, si no, vas a ser como los mayores que trabajan por obligación y que tienen días llenos de aburrimiento. Esperan el domingo porque el resto de la semana hacen lo que odian y eso no es bueno. Por eso, encontrarás poca gente feliz en el mundo".

¿Facundo Cabral es feliz?
“Sí, claro, porque soy libre, siempre lo he sido y la sociedad no me afecta con su basura. ¿Cómo le podés hacer con la sociedad que está tan mal?
Hacé como yo que no vivo con quienes están mal, sino con quienes están bien. Aprende a elegir no vivir con el dictador, ni con el demagogo, ni con el explotador, ni con el esclavo. Viví con la gente libre porque con esa gente sí se puede vivir".

¿Qué metas le habría gustado cumplir? ¿O ha cumplido todas?
"Me hubiera gustado escribir 'Cien años de soledad', pero ya la escribió -Gabriel- García Márquez. Me hubiera gustado hacer un gol como el segundo que le hizo Maradona a los ingleses y no lo hice. Me hubiera gustado escribir 'Breve Espacio', que es una canción maravillosa que compuso -Pablo- Milanés. -Reflexivo- ¿Sabés qué?... yo nunca he tenido una casa, no sé lo que es una casa, pero me hubiera gustado tenerla, bueno, viví otras cosas...
Me hubiera gustado llegar a casa el 24 de diciembre y jugar con mis nietos, eso pudo ser muy lindo. Pero soy una rata de hotel y la pasé lo mejor que pude, eso fue lo que Dios me dio.
A veces, cuando paso por los pueblecitos y veo a los viejecitos cuidando su jardín, pienso ¡qué lindo debe ser llegar a esa edad, estar ahí, con tu gente, no moverte! y eso no lo hice.
Estoy muy mal de salud, tengo cáncer terminal, pero si la vida me da un poquito más de tiempo talvez me vaya a un hotel, de los muchos que he conocido, para quedarme a trabajar al lado del jardinero. Sueño terminar cuidando flores, es lo que más me gusta además de la carpintería y el olor de la madera. Si me da un poco más de tiempo lo voy a hacer y si no, me iré así no más...”

¿Ha pensado en retirarse de la música?
“Me está retirando la enfermedad".

¿En qué país ha pensado retirarse?
“Todavía no lo sé... ya urge, tiene que ser en semanas".

¿En qué se inspira para escribir sus canciones?
"En todo lo que pasa, en todo lo que es. Pasan trenes, hay plantas, volcanes, guerrillas…hay recuerdos en todo lo que ves. Soy un cronista que podría estar trabajando en un diario porque cuento todo lo que veo. Trato de buscar el lado bueno, sacar una moraleja. Las malas noticias no son el modelo ideal, a mi no me dice nada que se haya caído un avión o lo que declaró el presidente de Estados Unidos. A mi me importa en dónde estoy".

¿Para usted qué es la vida?
"Si te animás y tenés el ingenio para vivir en plena guerra, entre locos y seguir manteniendo la cabeza fresca entonces la vida es una fiesta. Pero si sos cobarde… ¡la jodida!, la vida te resultará un trauma".




Imagen e información http://www.elquetzalteco.com.gt/12.07.2011/