"Mi prioridad hoy es cómo usar el tiempo que me queda"

"Mi prioridad hoy es cómo usar el tiempo que me queda"

Joan Manuel Serrat antes de su arribo a Neuquén (el miércoles en el Ruca Che), habla de política, arte, amor, fútbol y música.

15-3-2015

Paula Bistagnino

Creció con la música de la radio, el único medio que en una infancia austera podía proveerles sonidos a los hogares españoles. “Recién para los 15 o 16 años apareció entre nosotros un tocadiscos portátil que llevábamos de aquí a allá con discos de colores. Y la infancia fue escuchando lo que se pasaba en la radio, que era sobre todo canción española, las coplas; y también boleros. Hasta que llegó Raúl Matas, el gran innovador de la música juvenil en España, en los '60. Luego todo evolucionó muy rápido”, dice Joan Manuel Serrat en medio de su gran gira, a propósito de sus 50 años con la canción, que lo tendrá en la Argentina durante más de un mes, superando una veintena de shows, incluido el del miércoles en el Ruca Che neuquino.

¿Qué recuerdos tiene de su debut en la radio?

Aquel programa de radio en el que debuté era en directo, iba por las mañanas con público y allí iban artistas que pagaban por cantar, algo impensable hoy día. Toqué un día y, como gustó, toqué otro y otro. Estuve así una semana. Me acuerdo muy bien de todo aquello: de la telefonista, del portero, del lugar por el que entrabas… Seguramente estaba muy nervioso esos días.

¿Qué similitudes encuentra hoy con aquel joven a la hora de hacer una canción?

No tenía ninguna rutina al escribir mis primeras canciones. Sólo disponer de tiempo para hacerlo: lo hacía cuando tocaba la guitarra, porque en ese tiempo yo estudiaba en la universidad, así que ya tenía bastante yo con estudiar histología, botánica, genética y esas cosas. Y luego los ratos en los que me la pasaba tocando la guitarra, pero que eran más bien de ocio, así que no tenían una gran importancia. Recién cuando fui creciendo como profesional, eso empezó a ser una rutina. Pero entonces no era más que eso. Las cosas eran maravillosamente sencillas en ese tiempo.

¿Imaginó semejante carrera?

Todo esto es un cúmulo de coincidencias, de casualidades… Si hubiera pensado esto, lo más probable es que no hubiera hecho absolutamente nada y hubiera vivido muy frustrado, no hubiera conocido a mi mujer y estaría muerto o en muy malas condiciones. A ella y a las hijas que tengo, la estabilidad y la tranquilidad de mi casa son cosas que hay que valorar.

Serrat es una suerte de leyenda, ¿pesa a la hora de componer?

No diría que pesa, porque si bien puede que se compare y eso no es bueno, también eso lo empuja a uno. Así que puede ser ventajoso. A la gente le gusta lo que ha hecho propio, lo que lo ha formado. Muchos dicen que les gustan mis primeras canciones y, claro, las primeras para un chico joven son las de los años '90 y para el padre de ese joven son las de los '70. Creo que la dificultad pasa por poder llegar, por tener vehículos para hacerlo, a las generaciones jóvenes.

Ha musicalizado a grandes poetas y de un gran compromiso político. ¿Cuál es el poder que tiene la palabra en relación al cambio social?

Toda. La palabra es la forma en que nos comunicamos, el mecanismo con el que nos expresamos, con que nos informamos los unos a los otros, la palabra es todo absolutamente en el hombre. Pasaron millones de años hasta que el hombre desarrolló el lenguaje, una herramienta tan maravillosa. Es nuestra manera de sentir: cada uno de los idiomas nace de diferentes maneras de entender las cosas cada día. Y el lenguaje es lo que nos hace sacar eso que tenemos de únicos, diferentes a todo el resto de los animales: el pensar.

¿Cuáles son sus prioridades hoy en su vida?

Hoy, sin duda, es el tiempo. El tiempo que me queda. El tiempo que me queda para poder participar en esto que amo tanto, que es la vida. Usarlo de la manera en la que yo me sienta mejor, que no quiere decir más cómodo ni más egoísta, sino hacer las cosas que realmente considero que son prioritarias de hacer. Evitar lo inútil y lo superfluo y tratar de usar lo que me queda de la mejor manera. El cómo me lo va diciendo el día a día. Y también de alguna manera lo que conforma a este ser. Tengo cosas a las que no renunciaré jamás, no vamos a entrar en esto, que me llevan su tiempo y el resto dedicarlo a vivir, de una manera coherente con mi entorno, con mi sociedad, con mi familia, con mi corazón, con mi necesidad de amar y de ser amado. Dejando un ratito para el fútbol, claro.

Tiene una relación muy directa con la Argentina. ¿Incorporó algún hábito?

He incorporado cosas muy porteñas, algunas que incluso echo de menos cuando no estoy aquí. Yo apenas como carne fuera de la Argentina, por ejemplo. Y vísceras como mollejas y chinchulines, para nada. Otras tienen que ver con el paisaje. A veces me encuentro yo en Barcelona y miro el cielo y digo: mira ese cielo, parecería que estuviera en Buenos Aires… Y mi mujer me mira raro. Pero es que este es un cielo distinto, como más profundo, con unas nubes diferentes, con unas nubes que anuncian cosas… Afortunadamente salgo poco en Barcelona.

Por la cantidad de fechas de esta gira por nuestro país y el revuelo que se generó, ¿cree que hay como una sensación en la gente de que quizá sea una de las últimas?

Puede ocurrir que desaparezca pero no por voluntad propia. No tengo por el momento ningún planteamiento de dejar de hacer música. No sé lo que haré el año que viene y sigo preparando canciones y cosas. Ya llegar a fin de año después de semejante gira implica tomarme un tiempo para ver qué hacer y cómo me queda el cuerpo. Eso tiene que ver con lo que hablábamos antes de las prioridades y el tiempo: uno tiene que empezar a valorar... Tengo la sensación de que soy inmortal pero no creo que no estoy seguro de que no me vaya a morir (se ríe).

http://www.lmneuquen.com/mi-prioridad-hoy-es-como-usar-el-tiempo-que-me-queda-n249680