sábado, marzo 07, 2009

Serrat encendió Floresta con su voz y su sonrisa



"NANO" EN TUCUMAN"
Serrat encendió Floresta con su voz y su sonrisa


En lo que fue su quinta presentación en Tucumán, el cantautor aludió al cambio que produce el paso de los años citando a Heráclito. En el recital confluyeran tucumanos de varias generaciones.

GUITARRA EN MANO. El catalán en el momento de iniciar el concierto en Floresta, con la canción “Cantares”. LA GACETA / JORGE OLMOS SGROSSO (Día 5 de marzo)

Anoche, a las 22.11 se apagaron las luces del estadio Floresta, y cuando se prendió un tenue reflector que iluminó el piano, ya sonaban los acordes de “Para la libertad”. El silencio fue absoluto hasta que se encendió otro reflector, que enmarcó de luz el ingreso de Joan Manuel Serrat al escenario.

Vestido con jeans, camisa gris mangas largas, y una remera negra debajo, el cantante catalán apareció con los brazos en alto, y una enorme sonrisa. El público, compuesto por varias generaciones, estalló en una ovación. Muchos padres llevaron sus chicos, se vieron jóvenes y fans que ya lucen canosos, como el propio “Nano”.

El pianista Ricard Miralles, frente a un impresionante piano Steinway, acompañó el recital con la jerarquía y solvencia que de él se espera.

Incidente
Serrat se había colgado la guitarra y apenas empezaba a tocar los primeros acordes de “Cantares”, cuando desde la popular un grupo de chicas empezó a gritar pidiendo presencia policial. El catalán interrumpió la música y pidió que encendieran las luces. Al llegar el personal de seguridad al grupo de jóvenes, ellas le plantearon que hagan sentar a las personas del público que se encontraban delante. Una vez resuelto el problema, el recital comenzó.OTras la primera canción saludó: “Buenas, cálidas, húmedas y maravillosas noches”.

Luego citó al filósofo griego Heráclito para aludir a los constantes cambios del ser humano y su hábitat. “Nadie se baña dos veces en el mismo río, porque no son las mismas aguas, ni es el mismo el que se zambulle en ella”, dijo.
Expresó su alegría por haber regresado a Tucumán, dio su bienvenida al público y continuó con “De vez en cuando la vida”.

El sonido tenía el volumen justo para escuchar las canciones. El escenario parecía un teatro, ya que había sido decorado, además de las luces, con telas en las que se proyectaban imágenes alusivas a cada canción.
Más de 2.000 personas se hicieron presentes en floresta para disfrutar, cómodamente sentadas, del recital, en esta que es la quinta vez que Serrat se presenta en Tucumán. La primera ocurrió el 1 de marzo de 1973, en el club Caja Popular. La segunda, a principios de los años 1980; la tercera, en 1985 en Atlético; y la cuarta el 1 de junio de 1995, en Floresta, ante unas 2.500 personas., en un show recordado por la calidez del catalán y la performance general del espectáculo. En esa oportunidad, como anoche, la producción estuvo a cargo de Gabriel Fulgado. Aquella vez el “Nano” cantó 11 temas que integraban el álbum “Nadie es perfecto”. Entre ellas, “Niño silvestre”, “Historias de vampiros” y “Bendita música”. Estuvo en la provincia menos de 24 horas y, tras el espectáculo, siguió viaje a Córdoba.En la edición de mañana, LA GACETA presentará una cobertura completa del espectáculo que brindó anoche el cantante español.


El público vibró con Serrat
Ratificó el fuerte vínculo que lo une con los tucumanos. LA GACETA / JORGE OLMOS SGROSSO
(Día 6 marzo)


Con “Cantares” Joan Manuel Serrat arrancó anoche el recital en el club Floresta, colmado por sus seguidores. Concluida la canción, saludó afectuosamente, ratificando el fuerte vínculo que lo une con su público tucumano, integrado tanto por jóvenes como por adultos. Apeló a la conocida frase de Heráclito “Nadie se baña dos veces en el mismo río” para aludir a los cambios que producen los años en las personas y en sus vidas. El recital transcurrió en un clima de alegría y entusiasmo.


Información de: http://www.lagaceta.com.ar/
Imágenes de: LA GACETA / JORGE OLMOS SGROSSO

1 comentario:

Å®t Øf £övë dijo...

Freyja,
Venho desejar-te uma boa semana.
Beijonhos.