jueves, noviembre 19, 2009

A vueltas con el término CANTAUTOR


A vueltas con el término CANTAUTOR

Ante la apropiación indebida que del nombre se hace en estos días, el autor reivindica el término cantautor dentro del género llamado canción de autor o trova



19/11/2009

Creo que hay pocas cosas más difíciles que definir el término cantautor. Todos los que conocemos el género lo tenemos totalmente claro, no tenemos ni la más mínima duda, todos entendemos que Joan Manuel Serrat es un cantautor y que Alejandro Sanz no, por mucho que escriba y cante sus canciones. Pero por desgracia hay mucha gente que no lo entiende así, que se agarran a la semántica y llegan a la conclusión “canta-autor”, es decir, autor que canta, ¡y nada más!. Esto es un gran error, ya que si siguiéramos esta misma pauta en otras facetas, llegaríamos a la conclusión que el “modernismo” es toda obra que se hace en estos momentos, que “es moderna”, ¡y nos quedaríamos tan panchos!.

Los cantautores surgieron en un determinado momento que prácticamente nadie salía a defender sus propias composiciones, pero ese en realidad no era el mayor nexo común entre ellos, la autoría de los temas, ya que había gente como Rosa León o Mercedes Sosa que la mayor parte de su repertorio lo componían canciones escritas por otros y absolutamente nadie tenía la más mínima duda de que ellas formaban parte del grupo de los “cantautores”.

Tampoco hay duda en que la canción de autor se ha diferenciado de otras formas de hacer música en sus letras, incluso el diccionario de la Real Academia define a “cantautor” como <<>>, pero nos encontramos con casos como Paco Ibáñez que no escribió ni una sola letra y es uno de nuestros cantautores más importantes, uno de los primeros. Nadie tiene duda alguna en catalogarle como “cantautor”, aunque no escribiera letras.

En Latinoamérica utilizan el término “trovador” para definir a los cantautores y así se quitan el problema semántico de encima, ya que todos saben que Joan Manuel Serrat es trovador y Alejandro Sanz no lo es, ahí no caben discusiones.

Pero para comprender completamente este género, debemos tener también en cuenta otras consideraciones. La canción de autor nace en España influenciada por “la chanson” francesa, que es el antecedente más importante y tiene su comienzo y apogeo a finales de la década de los sesenta y durante toda la década de los setenta, nació como música “comprometida”, no en vano durante muchos años se la denominó “canción protesta”. La inmensa mayoría de sus integrantes partían desde posiciones políticas, sociales y culturales cuando menos (aunque yo siempre he defendido que no debía estar siempre unida canción y política, pero es innegable que esto fue así). Ha sido un fenómeno sobre todo hispanoparlante, que se ha dado en España y en toda Latinoamérica.

La canción de autor siempre se ha asentado sobre una estética, pero sobre todo sobre una ética, seguramente será por ello por lo que no ha sido un fenómeno de masas, un genero respetado, pero minoritario en la mayor parte de los lugares.

También debemos hablar de músicas, de sonidos cuando hablamos de canción de autor, ya que un cantautor tal y como lo hemos conocido siempre, no hacía cualquier tipo de música, la canción de autor, como ya he dicho nació entroncada directamente con las formas y los sonidos de “la chanson” francesa y fue una hija deseada de la música folk española, del folklore latinoamericano, luego, posteriormente ha habido algún que otro emparejamiento con el pop y con el rock, pero como algo puntual y sin abandonar sus esencias.

En estos aciagos días para la trova en general, nos encontramos con gente que cree que cualquiera que componga y cante sus canciones, cualquiera que ponga un interés especial en las letras (da igual su calidad y temática) se puede considerar como “cantautor”.

De vez en cuando recibo algún correo de estos “cantautores”, que cuando entras en sus myspace donde dice “influencias” te encuentras todo tipo de nombres, excepto nombres de cantautores (de los de verdad). Estos “cantautores” suelen tener un punto común, la edad, todos han nacido después de la llegada de la democracia a España, es decir, ninguno ha mamado el género en su momento de máximo esplendor, cuando todo el mundo tenía claro qué era un cantautor y sobre qué bases se sentaba.

Sería muy injusto por mi parte dejar entrever que no hay cantautores jóvenes, y muy buenos cantautores jóvenes por cierto, ya que no es así. Seguramente en España tenemos una de las mejores generaciones de cantautores jóvenes, ya no hablo de México, para mi gusto la mayor cantera de trova de todo el mundo de habla hispana. Yo personalmente creo que esta gran generación, mayoritariamente ha olvidado las temáticas sociales en sus letras, pero eso ya sería motivo de otra disertación otro día.

Tampoco quisiera que nadie pensara que menosprecio otros géneros, que pienso que toda esta gente a la que yo no considero “cantautores” sean de una calidad inferior, ni mucho menos, simplemente creo que hacen un género distinto al de la canción de autor, nada más, seguramente hacen una música tan respetable como cualquiera, pero que no debe ser catalogada como canción de autor o trova. Cuando criticaba que en algún concurso de cantautores otorgaran los premios a cantantes a los que yo no consideraba cantautores como tal, ni siquiera estaba criticando que esas personas se presentaran a estos concursos, sólo criticaba la falta de sensibilidad de respeto por parte de los organizadores y de los jurados, ya que si alguien que promueve un concurso de cantautores es el primero en crear la confusión en cuanto al género, ¡apaga y vámonos!. Debo decir en honor a la verdad que en el caso del concurso de Horta Guinardó, a los que yo les reproché esto en el concurso del año 2008, en el del 2009 tan sólo han seleccionado para los premios a cantautores “de los de verdad”.

Algo que tampoco llego a entender es el interés de estos cantantes por ser llamados “cantautores”, ya que la mayoría de ellos, cuando hablan conmigo (y con otros) vienen a decir que los cantautores tradicionales son unos aburridos, un tostón, que hacen llorar, dormir…. ¿entonces?, ¿por qué el interés en que te llamen cantautor?. Tal vez sea porque la mayoría de ellos lo hacen para intentar poner “una etiqueta de calidad” en sus letras, etiqueta que creo que mayoritariamente no se merecen, ya que una cosas es mostrar un cierto interés, dar un cierto valor y una cierta importancia a una letra y otra cosa muy distinta es ser un buen letrista y sobre todo, llegar a tener una clara intención poética.

Francisco Espinosa
Trovador


Información http://www.cancioneros.com/

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