lunes, mayo 16, 2011

Me llamo barro aunque Miguel me llame


Me llamo barro aunque Miguel me llame

por Vicente A. Serrano


Me llamo barro aunque Miguel me llame", este verso, arrancado del inicio al poema 15 de El rayo que no cesa, dibuja con claridad los patéticos perfiles del poeta Miguel Hernández. En aquel libro, publicado por primera vez en 1936, y recuperado más tarde por la popular colección Austral en 1949, alcanzamos a descubrir, muchos de nosotros, la contundente belleza de la poesía. Tengo entrañables amigos que, como yo, aún recitan de memoria una gran parte de aquellos veintisiete sonetos endecasílabos que inflamaron de fuerza nuestra juventud. Amigos que se siguen emocionando con la elegía a Ramón Sijé cada vez que a nuestro alrededor alguien muere “...como del rayo". Uno de aquellos amigos entrañables, incluso logró conquistar a su novia enviándole versos robados al poeta de Orihuela: “Mis ojos encontraron en un rincón los tuyos. / Se descubrieron mudos entre las dos miradas".

Una tragedia para no olvidar
La desolada muerte de Miguel Hernández fue uno de los crímenes más horribles y crueles del franquismo. Su trágica trayectoria vital debería ser recordada como el símbolo contundente de nuestra dramática historia reciente. Al hombre que desde el primer momento luchó con toda su honradez por la libertad y por la justicia, lo dejaron literalmente pudrirse en una mísera prisión, comido por la tuberculosis. Denunciado por sus enemigos, fue detenido al final de la guerra y en la “paz victoriosa" no hubo perdón posible para él, ni siquiera la supuestamente misericordiosa iglesia católica intercedió por su redención. Después, algunos poetas y escritores de su generación –la del 36– tratarían de justificarse afirmando que fue una tragedia inevitable. Como desagravio rápidamente se empeñaron en reeditar algunos de sus poemas –por supuesto los menos comprometidos– fue así como muchos de nosotros que vivíamos protegidos, pero ciegos, con un velo de falsedad e hipocresía a nuestro alrededor, pudimos descubrir a un gran poeta que desde un arranque popular imprimía a sus elaborados versos la fuerza y la contundencia que infiere el espléndido manejo de la palabra.

Quisimos saber algo más
“Tal es la mala virtud / del rayo que me rodea, / que voy a mi juventud / como la luna a la aldea". Quisimos saber algo más sobre aquel hombre desdibujado que arrancaba así un libro de poemas. “...Algún día / se pondrá el tiempo amarillo / sobre mi fotografía". Descubrimos que apenas le dejaron tiempo para que amarillearan los escasos retratos de su fugaz trayectoria vital. Algunas fotografías de tiempo de guerra, sobre todo aquellas dulces imágenes en Jaén, en 1937, con Josefina Manresa disfrutando con un permiso de su breve viaje de novios. Significativa también la fuerza del retrato que le hizo Buero Vallejo en la prisión de Ocaña en 1941. Desoladora la imagen del dibujo de su rostro amortajado realizado por el escultor José María Torregrosa. Quisimos ahondar en su biografía más allá de las hipócritas palabras que le dedicara José María de Cossío en el prólogo a El rayo que no cesa en la edición de Austral y con dificultad fuimos hilando algunos clarificadores datos y testimonios, aunque no todos, hasta que descubrimos la biografía escrita por José Luis Ferris. En Miguel Hernández, pasiones, cárcel y muerte de un poeta, publicado por Ediciones Temas de Hoy se perfila en su magnífica integridad el poeta que se empeñaron en desdibujar los unos y los otros.

El desprecio de los otros
Con textos como el de Ferris, afortunadamente la historia reciente comienza a tener pluralidad de lecturas, entrelíneas que se descuelgan, poco a poco, de los párrafos de la izquierda y la derecha y se empeñan, a modo de okupas, en emborronar unos márgenes hasta ayer impolutos. A los magníficos poetas del 27, pero señoritos al fin y al cabo, se les antojaba peculiar y folklórico este chico pobre, venido de provincias al que le endilgaron aquello de pastor de cabras. Pronto descubrirían, a su pesar, la sabiduría y formación lírica del “niño yuntero", sus dotes poéticas y su fuerza arrolladora para saber expresar los sentimientos de la gente sencilla. Poesía popular a la que aspiraban aquellos que quisieron minar su trayectoria poética: Lorca, Cernuda, Alberti... Y lo más terrible, alguno de ellos llegó a dejarlo abandonado en los difíciles momentos de la huida hacia el destierro.

Conmemora que algo te llevas
En un país con escasos lectores, las instituciones que dicen preocuparse por nuestra cultura, en vez de rastrear por las bibliotecas, miran al calendario. En un país que tuvo el sueño fugaz de considerarse nuevo rico, se les ha quedado tatuada la adicción a los centenarios. Fastos para conmemorar a autores que ignoraron en vida. Tenemos hasta una Sociedad Estatal para ello. Todo pueblo que se precie también busca desaforadamente por su cuenta en los archivos locales a un poeta que llevarse a la boca y conseguir así montar su municipal tingladillo, incluida una feria popular sobre la chistorra y la cuaderna vía. Las autoridades, auténticos tetrástrofos monorrimos, seguramente serán incapaces de acercarse a una sola línea del escritor en cuestión, pero entienden que conmemorar siempre les reportará beneficios materiales, los espirituales que sigan durmiendo en las estanterías. Se acerca peligrosamente el centenario de Miguel Hernández, ya están conmemoradores y chacales tomando la calle y peleándose por el espacio. Afortunadamente las páginas del poeta permanecen en el mismo lugar del estante donde las dejarais la última vez; si no es así correr hasta vuestra biblioteca o librería más cercana antes de que los árboles no os dejen ver el bosque.

El libro recomendado. Umbrío por la pena, casi bruno
Regresar al poeta, celebrar su recuerdo antes de que os lo impongan. Adentraros en las páginas de Miguel Hernández, pasiones, cárcel y muerte de un poeta, de José Luis Ferris (Temas de Hoy) para descubrir la fortaleza moral de un hombre abandonado a un trágico destino. Revisitar sus versos para sentir de nuevo la fuerza y la belleza de las palabras. José Luis Ferris también es el prologuista y editor de una magnífica Antología poética de Miguel Hernández publicada en Austral.



Nota: Mis disculpas a la Srta Araceli Villalba, por no saber que esta hermosa obra era de ella, pero de donde saque la información era el nombre que estaba, ya que me preocupo mucho de respetar el nombre de los dueños de las obras y de donde viene la información, (era el nombre que tenía la obra y por eso lo coloque), descubrir el mundo de Miguel Hernández ha sido para mí maravilloso, pero he tenido respeto y cuidado hasta de donde ocupo la información, por mi ignorancia y vivir de todo lo que fue el año hernandiano 2010 especial, gracias y disculpas

Verena Sánchez Doering



Imagen de Verena Sánchez Doering (con efectos)
http://www.eldigitaldemadrid.es/articulo_c/

11 comentarios:

Araceli Villalba dijo...

Hola, me llamo Araceli Villalba, soy la autora de la imagen que figura al principio de esta entrada y cuyo título es "Me llamo barro aunque Miguel me llame". Ha sido publicada por primera vez en la revista "Nerudiana" nº9 (Fundación Pablo Neruda)y fue realizada con motivo de la celebración del CENTENARIO de Miguel Hernández (1910_2010). Ha sido difundida en otros medios relacionados con este evento.
Es para mí un placer que la haya elegido para encabezar este magnífico artículo, pero le rogaría que subsanara el error de la autoría. Felicidades por su blog. Saludos cordiales desde Santander , España.
Araceli Villalba

Araceli Villalba dijo...

Hola, me llamo Araceli Villalba, soy la autora de la imagen que figura al principio de esta entrada y cuyo título es "Me llamo barro aunque Miguel me llame". Ha sido publicada por primera vez en la revista "Nerudiana" nº9 (Fundación Pablo Neruda)y fue realizada con motivo de la celebración del CENTENARIO de Miguel Hernández (1910_2010). Ha sido difundida en otros medios relacionados con este evento.
Es para mí un placer que la haya elegido para encabezar este magnífico artículo, pero le rogaría que subsanara el error de la autoría. Felicidades por su blog. Saludos cordiales desde Santander , España.
Araceli Villalba

julio 23, 2011 2:55 PM

Araceli Villalba dijo...

Inserto este comentario a petición de ESTHER NOVALGOS LASO, amigahermana, escritora y poeta que desde la noble tierra de La Rioja española me envía para que en su nombre lo incluya (debido a los problemas técnicos que ha tenido para incluirlo ella misma).
"Mi Querida Araceli: ¡Que me vas a contar que yo no sepa! Por culpa de personas sin escrúpulos me he visto forzada a afrontar situaciones desagradables por las que nadie merece pasar. En cierta ocasión, asistí a la presentación de un disco para el que se me había solicitado compusiera las letras . Y escribí las de varias canciones. Pues bien. Hube de soportar como el director del espectáculo anunciaba la actuación diciendo: Letra y música de……….(sitúa aquí el nombre del intérprete). Suponte aquí la cara que hube de poner al escucharle. Tras haber realizado altruistamente un trabajo, verte obligada a oír como la persona que te pidió el favor lo había registrado con su nombre. No imaginas el gesto del caradura cuando, al finalizar el espectáculo, le mostré mi presencia. No dije nada. Sus balbuceos y una especie de temor respondieron por él. Pero las letras continúan a su nombre. De estas, y con diferentes personajes, podría relatar unas cuantas. Bastantes.
Tu caso es más flagrante todavía porque ni siquiera te lo habían pedido. Afortunadamente, Amiga, en el trabajo magnífico que hiciste y que tanto nos gustó a tantos, está tu sello. Y están, acreditándote, los carteles conmemorativos del evento. Y estamos cuantos lo vivimos y sabemos de tu estilo y de tu buen hacer. Ignoro la satisfacción que puede llegar a proporcionar ver impreso tu nombre junto a algo que no has realizado.
A fin de cuentas cada uno, al final, recoge lo que merece. Tú, en este caso, la admiración de cuantos disfrutamos y conocemos tu proceder de Artista.
Y la persona que en una obra ajena ostenta la autoría, la vaciedad de aquellos que van alardeando de lo que no les corresponde. Triste recurso el suyo.
Concluyo. Si se trata de un equívoco, que lo enmiende quien lo hizo. Y si se tratara de una acción premeditada, que el culpable repare su injusticia.
Al César, lo que es del César. Y a Araceli Villalba Armengod la restitución de su nombre al magnífico trabajo: ME LLAMO BARRO AUNQUE MIGUEL ME LLAME.
Y que todo quede en nada. Por justicia, por ética, así debe de ser.

Esther Novalgos Laso"

Gunher Castanedo Pfeiffer dijo...

Soy Gunther Castanedo Pfeiffer y he colaborado en ocasiones con la revista nerudiana, lo cualme ha hecho conocer que la pintura sobre Miguel Hernández que se adjudica como auora Maite Esteve Santos, pertenece a una serie que hizo Araceli Villalba para la conmemoración del centenario del poeta de Orihuela y que fue publicada en la revista Nerudiana de Santiago de Chile. Se trata pues de un plagio sin nombre y de una muestra de mediocridad por parte de la señora Maite Esteve, que debería dar una explicación a su incalificable conducta.

Araceli Villalba dijo...

Inserto este comentario en nombre de JAVIER CANDUELA, eminente músico que ha desempeñado numerosos cargos en la capital cántabra a favor de la docencia y divulgación musical. Especialista en guitarra clásica, sus numerosos recitales y conciertos han llevado el sensible tañer de sus cuerdas a sitios tan distantes como El Japón. Es para mí un honor que me pida que añada en su nombre estas palabras que vienen a continuación:

"Recuerdo el día que Araceli Villalba me mostró su trabajo sobre Miguel Hernández, con motivo del Homenaje que se le brindó en Santander.

Me causó una notable impresión porque había captado la esencia del poeta, en un rostro original cargado de "Ausencia " (como el título de su famoso poema) y marcado por el dolor y la incomprensión.

Debajo llevaba el texto:" Barro me llamo , aunque Miguel me llame..." Fue un trabajo original, nuevo ,con fuerza interna , ... producto de su indudable creatividad.

Espero que sea reconocida su autoría lo antes posible.

Javier Canduela"

Félix dijo...

Me uno a los comentarios anteriores para reclamar que se reconozca de forma la autoría de la imagen publicada. Desconozco el motivo del error, pero quiero suponer que lo es. Puedo dar fe de que la autora es Araceli Villalba, que recientemente ha expuesto parte de su obra en Irún.

Supongo que no haya ningún problema en arreglar la situación, dada la generosidad de la autora, que no reclama más que su reconocimiento.

Félix Villalba

Verena Sánchez Doering dijo...

Araceli
Primero que nada mil disculpas, por ocupar tu obra
Segundo era el nombre que salia en la obra cuando la encontre
Tercero gracias infinitas por decirmelo y saber que es tuya y felicitaciones, porque realmente es admirable
Lamento haber dado malos momentos, tengo una web donde escribo y se lo que se siente que copien y no respeten el nombre del autor, lamento que te suceda esto, te creo todo lo que me dices, no necesitas darme explicaciones.
Se que desde que Serrat saco el primer disco dedicado a Miguel Hernández, quede maravillada con su poesía...pero lamentablemente ese disco llego a mis manos después de muchos años, como otros, porque mi país vivio una dictadura de 17 años, donde no supe y tuve acceso a muchas cosas bellas, como la música y la cultura, internet a abierto un mundo fantastico para mí.
Tuve que dejar de trabajar hace ya 6 años por motivos personales...y desde ahí me doy tiempo para buscar y aprender de tantos que no estuvieron en mi vida.
ya que muchas cosas no llegan todavía como deberían de llegar a Chile...
Gracias Araceli y mil disculpas y en lo que te pueda ayudar aqui estoy, un abrazo grande

Verena Sánchez Doering dijo...

Gunher
Gracias por tus aclaraciones, ya me disculpe con Araceli
No sabía que era su obra y que bueno que hayan personas que apoyan a Araceli a aclarar esta situación
fui a tu blog, pero no te pude dejar el mensaje
Gracias y que estés muy bien

Verena

Verena Sánchez Doering dijo...

Feliz
Gracias pero no sabía que esto sucedia, ya aclare con Araceli y pedi mis disculpas, fue sin mala intención y yo encontre la obra con el nombre que tenía
agradezco por el apoyo a Araceli y que que estés bien

Verena

Félix dijo...

Me alegro de que la cuestión de la autoría de la imagen haya quedado solucionada. Está claro que ha sido un error involuntario y ha quedado subsanado.

Un saludo
Félix Villalba

Verena Sánchez Doering dijo...

Si Félix quedo aclarado para mi, y ella puede seguir haciendo valer que no ocupen el nombre falso en su obra, pero por respeto no la ocupe.
Lamento que sucedan estas cosas, pero siempre trato de verificar la información, pero ocupe lo que salia
Saludos y gracias

Verena