"Vivimos cada concierto como si fuera el último de nuestra vida"

"Vivimos cada concierto como si fuera el último de nuestra vida"

Serrat y Sabina inician hoy en el Pabellón Príncipe Felipe su gira española 'Dos pájaros contraatacan'

EVA GARCÍA 29/06/2012

Cuando el Titanic se hundió "nos escapamos como dos valientes cobardes". Por eso, en febrero de este año salió a la venta el disco La Orquesta del Titanic, un trabajo hecho a cuatro manos entre Joan Manuel Serrat y Joaquín Sabina, que hoy presentan en el pabellón Príncipe Felipe (22.00), en el inicio de su gira española.

El hundimiento del barco, en el que los músicos siguieron tocando, "no queríamos que fuera una metáfora de la vida, pero en estos momentos en los que el euro y la Unión Europea se hunde, nosotros seguimos tocando", aseguró Sabina durante la presentación del concierto, un diálogo en el que Serrat lleva la voz cantante y Sabina pone la ironía.

Zaragoza, que ya fue el escenario de su primera gira conjunta, Dos pajáros de un tiro, también un 29 de junio, aunque de 2007, vuelve a dar el pistoletazo de salida de esta segunda, Dos pájaros contraatacan. "Porque nos ha traído mucha suerte", reconoció el de Úbeda. "Y por más cosas, porque estoy a gusto aquí y es una ciudad con la que tengo una relación de muchos años y a la que he visto crecer; y porque llevamos un saxofonista baturro porque es de Ejea", señaló Serrat.

A CUATRO MANOS De ese concierto de hace cinco años, reconocieron que "conceptualmente no se mueve mucho. Somos dos artistas que intercambiamos los papeles"; sin embargo, cuando les plantearon repetir la gira no quisieron hacerlo "si no había nada que aportar". De ahí que surgiera La Orquesta del Titanic, un disco "hecho a cuatro manos, que nos ha permitido profundizar en nosotros mismos"; y en los que más que al amor, cantan "al desamor", que consiste en "ver si esa hija de puta que se fue con el imbécil, se arrepiente toda la vida", dijo Sabina.

Serrat disfrutó con esta propuesta, aunque "también con aquella", en la que recordó que "Labordeta estuvo tocando en el otro piso". Y parece que Sabina también lo pasó bien, ya que califica esta segunda gira como "más rica y divertida". Pero ¿cómo ha sido ese trabajar a cuatro manos? "Igual que cuando uno tiene que redactar un artículo con otro, tiene que tener una relación especial y tener vínculos. Esto pasa por el reconocimiento del otro, el respeto, la sinceridad y también por el no. Si a lo que tú haces el otro dice no, no hay nada que discutir, aunque en ocasiones hay alternativas y en este caso, la propuesta alternativa ha sido mejor", se explayó Serrat. A lo que Sabina apuntilló: "No", para luego añadir que "tenemos sistemas distintos" de trabajo.

La relación entre ellos sobre el escenario es buena, pero ¿y fuera? "La vida es complicada y la amistad es la prueba del nueve --aquella que se hacía para comprobar que una multiplicación estaba bien-- de la relación entre las personas", señaló el catalán. Sin embargo, para el de Úbeda, las juergas ya solo quedan en las ruedas de prensa y a poco más que compartir una cerveza, después de que Sabina se bebiera la suya mientras Serrat terminaba el agua que le habían servido al principio. Al autor de Mediterráneo le "tranquiliza" ver a su compañero de fatigas "y saber que vamos a tocar juntos". Incluso bromearon con realizar el ritual de unir las manos de decir "ummmmmmm". Vamos, que se dicen: "Estamos aquí y vamos a vivir este concierto como si fuera el último de nuestra vida... y algún día será verdad".

Acaban de volver de Latinoamérica, donde más de 400.000 espectadores han disfrutado de su gira, lo que nos "hace sentirnos bendecidos por los dioses, devolviendo ese esfuerzo dejándonos la piel en el escenario". A ellos les va bien, pero "seguimos quejándonos de la realidad y de cualquier injusticia", porque como dice Sabina: "En tiempos de escasez, creamos puestos de trabajo y eso, según dice el Gobierno, es de agradecer".

Pero aún así reconocen que el mercado de la música "los últimos tiempos ayudan poco a la difusión de las canciones", porque se olvidan al momento y todo se ha "sustituido por un mundo virtual que es mentira". Para Sabina, "hay un antes y un después del Asereje".

 
Información http://www.elperiodicodearagon.com/noticias/escenarios/vivimos-cada-concierto-como-si-fuera-ultimo-de-nuestra-vida-_768922.html